Hola a todas y todos:
Volvemos a nuestra clásica revisión de premios. Excepto por los de siempre, se aprecia en una mejoría clara en las notas de ecuanimidad de los premios.
El poemario ´Sed de sal´, del poeta ibicenco Rubén Tejerina, fue galardonado con el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, dotado con 6.000 euros. El jurado del premio estuvo presidido por Bruno Pérez e integrado por Blanca Hernández Quintana, Sergio Domínguez Jaén, Víctor Ramírez y Cayetano Sánchez.
No vemos, hasta lo que nuestro conocimiento llega, ningún conflicto de intereses entre premiado y jurado. Es cierto que el premiado no es un desconocido y que, según la nota de prensa, acumula 22 premios, dato que suele ser relevante para algunos jurados “inseguros” que no quieren errar el tiro. No sabemos si será éste el caso o no pero a priori parece todo muy normal, especialmente en comparación con otros premios
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 75/100
El escritor jienense Juan Carlos Abril ganó el XIX Premio de Poesía Manuel Alcántara. Con su poema titulado Ave Félix, Abril se llevó la nada despreciable cifra de seis mil euros por un único poema. El jurado, presidido por Álvaro García, estuvo integrado por el delegado municipal de Educación, Miguel Briones; el ganador de la edición anterior, Joaquín Márquez, así como por Juan Gómez Macías y Manuel Pimentel.
Recordamos que Juan Carlos Abril se doctoró en Literatura Española, con una tesis dirigida por Luis García Montero, sobre la poesía de José Manuel Caballero Bonald. También que Manuel Alcántara ha publicado algo en Visor. Además, Alcántara tiene premios con nombres tan entrañables como José María Pemán, Luca de Tena y demás que forman parte del patrimonio de la pinza. Incluso algún premio que no figura en su página de wikipedia como el IV Concurso de Artículos sobre el vino, que ganó en 1959 y que le supuso la nada despreciable cifra de 20.000 pesetas (un artículo muy comprometido socialmente con su época, y muy bien dotado, casi los 33cm de dotación del actor porno John Holmes, teniendo en cuenta que con ese dinero casi se podía comprar un piso en aquellos tiempos). De hecho, la foto que ilustra la entrega del premio actual parece una reunión de banqueros de aquella época tan maravillosa para algunos:
http://www.diariosur.es/v/20110601/cultura/juan-carlos-abril-gana-20110601.html
Ohhhh, le temps... Parece que no pasa.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 1/100
El escritor mallorquín Eduardo Jordà obtuvo el premio Emilio Alarcos de poesía en su décima edición con el poemario titulado Tulipanes rojos. Jordá colabora como columnista en DIARIO de MALLORCA, del grupo editorial Prensa Ibérica, señor sí señor, y en el ABC Cultural. El jurado que le otorgó el premio estuvo presidido por Luis García Montero, y actuaron como vocales Josefina Martínez, José Luis García Martín, Aurora Luque, Chus Visor y Carlos Marzal. Desde 1989 Jordà reside en Sevilla. Es importante recordarle lo importante que es hidratarse en esta época del año si vive en la capital andaluza.
Un clásico entre los premios es premiar a un crítico. Un clásico mayor es que un crítico premie a otro crítico, incluso que vaya anticipándolo:
http://www.elcultural.es/version_papel/LETRAS/12795/Mono_aullador
Sin mencionar su paso por Clarín, tan García Martín. Tampoco es un desconocido para Aurora Luque. Ni siquiera para alguien de la inocencia de Montero.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 10/100
Pedro Gandía (Cuenca 1953) fue el ganador del Premio Internacional de Poesía “Hermanos Argensola”, dotado con 6.000 euros, con el poemario “Acrópolis”. El jurado estuvo compuesto por Pere Rovira, presidente, Mª Ángeles Naval, Luis García Jambrina, Ricardo González, Chusé Navarro, Lorenzo Oliván, María Soledad Catalán y Sergio Gaspar, con voz pero sin voto (precioso eufemismo).
Aunque el premio Hermanos Argensola se había convertida en pasadas ediciones en una auto sacramental, parece que los tirones de orejas por fin han llegado(aunque el resultado fue un 4 a 3). No vemos ninguna ligazón relevante entre el premiado y el jurado, incluyendo intereses editoriales.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 80/100
Teresa Núñez ganó el premio Ciudad de Pamplona y recibirá 5.000 euros y la edición del libro al ganar la quinta edición de este concurso. Núñez es autora de poesía, narrativa y teatro y tiene numerosos premios. El jurado, organizado por el Ateneo Navarro, con el patrocinio del Ayuntamiento de Pamplona y Caja Laboral, y la colaboración de AC Hoteles, estuvo compuesto por la concejal delegada de Cultura, Paz Prieto, Yolanda Castaño, Jesús Munárriz, el vocal de Literatura y Lingüística del Ateneo Navarro Gaudencio Remón, y Joan Gonper, de la editorial Celya.
Al margen de hipotéticos vínculos a través de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, no vemos nada relevante respecto a este premio. La comida/cena debió resultar curiosa.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 80/100
El escritor Miguel Albero Suárez (Madrid, 1967) obtuvo el XXI Premio de Poesía Jaime Gil de Biedma, dotado con 10.000 euros y convocado por la Diputación Provincial de Segovia, con su obra 'Sobre todo nada'. El jurado estuvo presidido por el titular de la Diputación, Javier Santamaría, y coordinado por Gonzalo Santonja, director del Instituto de la Lengua de Castilla y León. Formaron parte del mismo Víctor García de la Concha, Luis María Anson, Antonio Colinas, Juan Manuel de Prada y José María Muñoz Quirós. También formaron parte del jurado Carlos Aganzo, ganador de la edición anterior y director de El Norte de Castilla, y Chus Visor.
Albero Suárez es primerizo en esto de la poesía pero no lo es en el mundo literario. Diplomático de carrera según la nota de prensa, ya había publicado novela en Tusquets. Además ha sido director de Instituto Cervantes, uno de esos reinos de Taifas pornográficamente bien pagados, y que tantas relaciones procuran. Jurado ultraconservador, cómo orienta ideológicamente Chus los jurados dependiendo del color de la alcaldía, que haría las delicias irónicas de Jaime Gil de Biedma (o quiza le provocaría una arcada súbita).
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 15/100
El V Premio de Poesía Antonio Gala recayó en Pablo Guerra con el poemario titulado “Cielos Quemados”. El jurado estuvo formado por su presidente Antonio Garrido, Antonio Hernández, Ignacio Caparrós, Manuel Salinas y Rafael Porras. Otro premio que parece querer curarse de conflictos de intereses en pasadas ediciones. Nada que objetar esta vez.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 90/100
El XXXI Premio Hispanoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez fue para el poeta Luis Martínez-Falero, por la obra 'Fundido en blanco'. El poeta, nacido en Albacete en 1965, es doctor en Teoría de la Literatura por la Universidad Complutense de Madrid, donde da clases de Teoría de la Literatura. En el año 1997 obtuvo el Premio Adonais de Poesía por el libro "Plenitud de la materia", algo que, según el Jurado, confirma su trayectoria poética y el prestigio del premio Juan Ramón Jiménez (¿Los jurados no se dan cuenta de que con este tipo de declaraciones siembran la sospecha?). El Jurado ha estado conformado por los profesores de Filología Hispánica José Antonio Expósito, Rocío Fernández Berrocal, Soledad González Ródenas, Antonio Martín Infante y María Jesús Domínguez Sío.
Históricamente este premio no nos ha gustado y tiene algunas de las “coincidencias” más sorprendentes de la historia de la poesía española contemporánea. Profesores dando premio a profesor tampoco es una noticia que nos tranquilice especialmente. Y la justificación del premio al premiado que prestigia al premio es sintomática. Con dudas pero sin certezas.
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 25/100
El Jurado Calificador del XI Premio Casa de America de Poesía Americana, integrado por Julia Escobar, Luis García Montero, Chus Visor, Waldo Leyva, Andrés Pérez Perruca, Benjamin Prado y Anna María Rodríguez Arias concedió por unanimidad el Premio de Poesía Casa de America de Poesía Americana al libro "Explicaciones no pedidas" de la poeta colombiana Piedad Bonnett.
El núcleo duro actual de Visor al completo: Montero, Prado y Chus. Piedad ya había publicado en la colección pija de la editorial madrileña el libro “Las herencias”, de la misma autora. Waldo Leyva y Piedad Bonnett, entre otros, firmaron el Manifiesto para que Granada fuera Capital Mundial de la UNESCO, bajo el pepero hermano de Montero, Juan García Montero, al frente de la cultura municipal granadina (de nuevo la pinza). Ambos poetas, Leyva y Bonnett, también están en la lista de otro manifiesto, el de los cachorros de la “Poesía ante la incertidumbre”. Círculo cerrado. De esos premios que producen indignación. Como la apropiación indebida del nombre de Federico García Lorca o más recientemente, al 15M. Como todo este grupúsculo que se frota las manos ante la llegada de Rajoy (veréis qué premios nacionales de poesía nos esperan).
Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 0/100
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