domingo, 9 de septiembre de 2007

Babelia, primera semana de septiembre

Comenzamos Septiembre con una única crítica de poesía en Babelia.

La crítica de poesía la realiza el profesor Ángel Luis Prieto de Paula sobre el libro de Félix de Azúa "Última Sangre", editado por Bruguera, que recoge su obra poética desde 1968 a 1983, tres poemas de 1987 así como el poemario de mismo nombre que el volumen y que ha escrito en los últimos cincos años. El prólogo es de su compañero generacional Pere Gimferrer.

Félix de Azúa es un colaborador habitual de El Pais, y aunque creemos en la profesionalidad de Prieto de Paula, evidentemente su valoración crítica viene influenciada por esto.

Objetividad del crítico en este caso: 4/10

A parte de la objetividad, estamos de nuevo ante una buena crítica de Prieto de Paula, que parece que recupera su forma, se aleja de pedanterías y del tono catedralicio, hace crítica de verdad y escribe, como ya hemos dicho en otras ocasiones, bastante mejor que muchos de los autores que critica.

Félix llevaba unos 25 años sin publicar un nuevo libro y el libro que presenta es básicamente el mismo que ya publicó Hiperión hace casi 20 años pero con el nuevo poemario incluido.

En nuestra opinión, la poesía de Azúa fue perdiendo calidad con los años, y sus excelentes dos primeros libros, llenos de ironía, frescura, frío, surrealismo, aconfesionalismo, y en donde, para ser sinceros, se abusaba de las exclamaciones, de un cierto tono pomposo, de los juegos de palabras y de un falso hermetismo, se fueron transformando en sus últimos libros cada vez más en ejercicios linguísticos y en un marcado prosaismo sin interés poético.

Su nuevo poemario Última Sangre tiene como protagonistas a Eva, Adán, Caín y a Abel. Éste último libro es un mero ejercicio linguístico que, como bien dice el crítico, puede resultar interesante a algunos como entretenimiento intelectual, a nosotros no desde luego, pero en dónde la poesía, y esto lo decimos nosotros, brilla por su ausencia.

En la rueda de prensa de presentación, el propio Félix afirmó que su poesía surge de un juego linguístico. Asimismo, se definía como un autor que escribe versos, "que es diferente que ser un poeta".

Nosotros pensamos que Félix fue poeta, y bueno, hace unos años, y ahí están sus primeros poemarios como testigo. Pero tiene razón sobre el hecho de que no es un poeta. Ya no. No la tiene en que todavía escriba versos. Quizás ha pasado demasiado tiempo.

Valoración del libro "Última Sangre": 6 / 10 (en realidad nuestra valoración estaría por encima del 7 para los primeros libros, en torno al 4-5 en los últimos, y sería de 2 para el más reciente).

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Tengo el nuevo libro de Félix y no puedo estar más de acuerdo. Después de tantos años metido en ensayo y novela, además de en política, está claro que su poesía ha perdido muchísimo. Fue un poeta interesante y es un buen ensayista pero su poesía actual no es buena.

Yo creo que el motivo real de sacar este tipo es que el libro de Hiperión salió hace muchos años y sólo se encontraba de segunda mano. Así que para darle mayor atractivo comercial han incluido esos poemas últimos.

A pesar de eso, y sólo por sus primeros poemas, vale la pena comprarlo.

Un beso

Anónimo dijo...

¿Este Felix es el mismo que el de Ciutadans Partit de la Ciutadania? Ahora empiezo a entender todo.

Anónimo dijo...

¿Qué ocurre, que un poeta no puede meterse en política?. ¿Acaso García Montero es menos poeta por ser miembro de IU?. ¿O Luis Alberto de Cuenca por ser simpatizante del PP?. ¿O es que el problema es que sea de un partida "antipartidos"?.

Anónimo dijo...

He descubierto, por casualidad, su blog. Me parece, en principio, interesante y así lo he recomendado a varios amigos. Sin embargo no estoy de acuerdo con su opinión de que la editorial Hiperión tiende hacia la poesía de la experiencia, ya que opino que ya no se puede hablar de tal tendencia, que se trata de algo que ya se ha superado. Otros premios Hiperión, previos a los 'hiperiones' 2007, quedarían bajo la sombra de la experiencia que han vaticinado y no creo que fuera justo. Me gustaría terminar agradeciendo su labor y animándoles a realizar más criticas de libros y a adentrarse en el fascinante -y corrosivo- mundo de las revistas literarias. Que hay tema.

Un abrazo, Un Poeta Cualquiera

Anónimo dijo...

Hace tiempo que os sigo y vuestro blog me parece interesante, divertido e imprescindible.
Por eso os lo digo -desde el cariño-: ojo con las faltas de ortografía; estropean el conjunto.

Saludos.

Addison de Witt dijo...

Hola,

Anónimo, este "cacharro" tiene incorporado un diccionario que corrije automáticamente las palabras supuestamente mal escritas. Por ejemplo, ese "corrije" lo pone automáticamente como "corrige". Tan portentoso cerebro a veces se nos escapa a nosotros humildes humanos. Así que cuando observéis alguna burrada, igual que nosotros no nos cortamos, vosotros tampoco, por favor. Es nuestro deber revisar el revisador, en este caso el ortográfico, igual que hacemos con los críticos. Así que, querido anónimo, danos un poco más de caña con la ortografía.A nosotros también nos hiere la vista cuando vemos una falta.

Y por lo que se refiere A un Poeta Cualquiera, pues nada, bienvenido. Sobre el tema de la tristemente famosa poesía de la experiencia, en buena hora a alguien se le ocurrió leer con las páginas al revés el libro de Archibald MacLeish, habría mucho que decir. En realidad, hasta la poesía más exenta de experiencia tiene como base la experiencia del autor, sea vital, filológica, filosófica, masturbatoria, etc...

Lo que aquí se ha venido a llamar poesía de la experiencia es lo que nosotros llamamos poesía confesional, copiando a los anglosajones y aún a sabiendas de que el término no es perfecto.

Y poesía confesional se sigue y se seguirá escribiendo durante mucho tiempo. A nosotros nos encanta la poesía confesional, como muchos otros tipos de poesía. Sólo que la poesía realizada por nuestros poetas de la experiencia o confesionales ha sido, en general y en los casos más conocidos, muy floja, sobre todo si se compara con la de otros países.

Y respecto a Hiperión, no es un premio que sigamos especialmente, porque no reúne, en nuestra modesta opinión, los requisitos mínimos que en su momento, y falta poco, pondremos en esta página respecto a lo que debe ser un premio de poesía que nosotros valoremos positivamente. Hemos echado un vistazo a los ganadores de los últimos cinco años del premio, y con la excepción de David Leo, el resto de ganadores se podrían incluir, con mayores o menores matices, dentro de esa corriente. Tema abierto a debate.

Sólo hay que analizar la composición del jurado durante esos años para entender lo que queríamos decir.

En fin, que gracias a todos por vuestras aportaciones. A todo esto, hoy es la Diada. Me imagino que Montse y el otro anónimo estarán al tanto. Casualidades.