miércoles, 11 de marzo de 2009

¿Cuándo nos vamos? Autocrítica a Addison de Witt


Esta es una crítica a Addison de Witt como colectivo. Han pasados dos años, jamás pensamos que el blog tuviera el éxito que ha tenido pero es justo por eso que creemos conveniente reflexionar en voz alta sobre si vale la pena continuar. Justo cuando estamos cerca de las 10.000 visitas mensuales, 80 países y otras cifras mareantes.

Que nadie entienda que esta reflexión la hacemos con el fin de encontrar ánimos por vuestra parte. Es simplemente una forma de poner por escrito lo que sentimos.

AdW se creo en un momento en el que a este colectivo le preocupaban varios aspectos de la poesía española contemporánea. Creemos que, en general, hemos fracasado en todos y cada uno de los objetivos que nos propusimos.

Contracrítica: Nuestro objetivo en este terreno era que el amiguismo que nutre las críticas de poesía, el compañerismo, la falta de objetividad y, en algunos casos, la falta de profesionalidad mejoraran. Hoy, dos años después, las cosas han empeorado. Babelia ha reducido notablemente las reseñas de poesía y en muchas de ellas continua el amiguismo generalizado, incluso hasta cierta provocación (recordad también algunas reseñas amiguistas de buenos cerebros y ensayistas como Prieto de Paula o Ortega en menor medida). El Cultural ha reducido a una reseña extensa su cobertura de poesía centrándose sobre todo en traducciones. Pero el amiguismo también ha seguido campando durante estos dos años. Recordamos las coberturas del premio Loewe, los artículos sobre DVD de Azancot, aunque hemos percibido una ligera mejoría de la objetividad. Sin embargo, el nivel de las críticas ha sido bajo, con muy poco valor añadido y en algunos casos cayendo en un estilo que, con el mayor de los respetos, daba algo de vergüenza ajena (Zaitegui). El otro gran suplemento, ABC, mantiene a un único crítico bueno entre sus filas mientras el resto es de nuevo un nido de amiguismo.

En otras palabras, no parece que la exposición pública de las camaderías y de las malas críticas haya tenido mucho efecto en los cambios de conducta salvo en algunos casos concreto como podría ser el caso de Manuel Rico en Babelia, con lo que mal que empezamos, o de Jaime Siles en ABC.

Premios de poesía: Poco ha cambiado también el panorama de los premios de poesía. Y lo peor es que no hemos podido publicar los casos más sonrojantes porque habrían tenido claras implicaciones legales y no era el objetivo de este colectivo. Pero la sombra de la duda, a veces de la certeza, sigue planeando hoy igual que hace dos años. De poco han servido tantas denuncias que hemos realizado. A nadie se le han caído los anillos porque los premios fueran anunciados de manera anticipada, o porque los jurados fueran un año jurado y otro premiado, o porque los jurados fueran premiando a distintos miembros de una misma tribu poética, todos amigos, o que algunas editoriales premien sólo a sus poetas a los que alimentos su bolsillo y su curriculum. O a que directamente se escojan poetas que pasan a rondas finales con una pre-selección previa de lo peor para que gane el elegido. No ha habido, que nosotros sepamos, ni un solo premio de poesía que haya instaurado un código deontológico como el que sugerimos en su día. Los jurados y todo lo que les rodea quieren oscuridad, lo contrario a luz y taquígrafos. Da igual que se juegue con dinero público o con el trabajo de cientos de poetas. A nadie parece importarle en absoluto. La normas del premio nacional de poesía han empeorado todavía más el premio. Sólo a los que parecen no ganar y que se presentan les importa este tema. Pero porque no ganan. Este capítulo mancha a todas las grandes tribus poéticas españolas. A todas sin excepción. Si por tanto, todos parecen querer jugar a este juego, ¿quienes somos nosotros para decir que está bien o está mal? Es predicar en el desierto. La ética, sea lo que sea, no importa. O la nuestra es la equivocada. Importa el fin. No los medios para lograrlo.

Calidad de la poesía y descubrimiento de nuevos poetas: Otro de los objetivos en los que este colectivo ha fracasado salvo en algún caso concreto ha sido a la hora de descubrir nuevas voces y poetas. La famosa sección de Secretos de poesía apenas ha tenido entradas. Por una parte el día a día nos ha vencido. Por otra las editoriales no han sido proactivas en sus envíos, en general. Hemos tenido que ser casi siempre nosotros los que pedíamos los libros. Al haber tantas editoriales, es difícil poder realizar esa labor de selección. Y tampoco hemos tenido mucha colaboración por parte de nuestros lectores. Por eso surgió la idea de presentar los premios anuales. Era una oportunidad de escarbar bien entre todo lo publicado. En ese sentido, estamos un poco menos descontentos porque sí hemos sacado algún nombre de los que no suelen figurar en los suplementos. Varios de los libros premiados este año y el pasado no habían sido reseñados y para el lector general de poesía incluso pueden ser desconocidos. Por otra parte, pensamos que hemos generado mucha frustración. Un número superior a 250 autores no han recibido ni un solo voto este año y una cifra similar el pasado año. ¿No es mayor el daño que el beneficio? Por terminar de complicar la reflexión, lo cierto es que es difícil encontrar buenos libros de poesía. ¿Cuantos buenos libros se publicaron en, por ejemplo, 1951? ¿O en 1879? ¿Se entiende la pregunta? Hay menos de diez buenos libros publicados al año. Si nos ponemos exigentes, menos de cinco. Si se publican más de 300, parece que estamos contribuyendo a la frustración de unas cuantas personas. ¿Quienes somos nosotros para generar esa frustración?

Nuestro criterio es uno más. El hecho de que nos parezca mala la poesía de determinados poetas, sean buena parte de los chicos de la experiencia, o aquella poesía más embellecida y heredera de grupos como Cántico y otros neobarroquismos modernistas, o cierto macarrismo en alguna poesía social, no significa que sea mala objetivamente. Sólo implica que a nosotros no nos gusta. No tenemos la posibilidad de objetivar lo que es buena poesía y lo que es mala poesía. Podemos hablar de innovaciones, de conservadurismo, de manejo técnico, pero a veces cuando decimos que un poema o un libro es malo, es sólo una opinión estética.

Daño: Y enlazamos esto con un punto importantísimo para nosotros. Sabemos que hemos hecho daño a algunos poetas con nuestras críticas. Algunos críticos parece que no les importa en absoluto hacer daño e incluso parecen disfrutar de ello. Nos estamos acordando ahora mismo de un crítico del norte de España que hemos leído muy recientemente en una entrevista. A nosotros nos jode hablar mal de un poeta, en especial si no ha habido nada de premios ni de cosas similares. Es decir, simplemente porque su opción estética, o la forma en la que la lleva a cabo, no nos gusta, lo decimos y hacemos daño. Incluso cuando ha habido corruptelas de premios, a veces nos hemos sentido mal criticando. Al fin y al cabo, parece que es algo inherente al ser humano entrar en ese tipo de oscuridad tan frecuente, ¿no? Los raros somos nosotros, no vosotros. Otras veces, cuando hemos reaccionado de manera exagerada a algunos insultos y cosas similares, también nos hemos sentido mal después. El objetivo de este blog no puede ser hacer daño a las personas. Y sabemos que lo hemos hecho. Mal. Muy mal.

Objetividad: Y ya para ir terminando, ¿hasta que punto somos objetivos? Somos cinco personas. Cada una conoce a un montón de poetas. Es verdad que podemos controlarnos mejor al ser un grupo pero, ¿no hemos dejado alguna vez de premiar a alguien porque lo conocíamos y pensábamos que debíamos ser más duros? ¿O no habremos hecho sin querer justo lo contrario y hemos sido más condescendientes? ¿Qué pasa con nuestra obra? ¿Cómo nos valoramos a nosotros mismos? ¿Nos hemos autocriticado más de lo normal para parecer que no éramos? ¿O para intentar ser falsamente objetivos? ¿O a veces también hemos sido más generosos de lo que debíamos con nosotros? ¿Es éticamente reprobable premiar a un miembro del colectivo? Parece que sí pero, ¿y si hemos sido injustos no premiándole en su labor como poeta si el resto cree que lo merecía? ¿O no sería injusto? ¿O sí?

Idealmente un crítico de poesía no debería de ser poeta. Y nosotros lo somos. Luego este colectivo se aleja de lo ideal. Y lucha por la objetividad pero parece una guerra perdida de antemano. Una quimera.

Estas son algunas de las reflexiones que ponemos en voz alta. Básicamente no sabemos si tiene sentido seguir. Sentimos que hemos fallado en buena parte de nuestros objetivos y sentimos también que hay una cierta expectación sobre lo que hacemos, responsabilidad que quizás nos viene muy grande. Un día u otro AdW desaparecerá. El nivel de trabajo que exige no se puede mantener de manera indefinida. La duda es no si cerramos sino cuando. Si hemos fracasado, deberíamos cerrar ya. Si hemos logrado cambiar algo, quizás se puede cambiar un poco más antes de echar el cierre, pero deberíamos cambiar fondos y formas. Nosotros comenzamos a pensar en el fracaso generalizado y absoluto.

Gracias a todos por habernos seguido hasta aquí en cualquier caso. Sea cual sea la decisión final, hemos aprendido mucho, tanto de nuestros amigos como de nuestros enemigos. A todos nos une el amor a la poesía. Eso debería haber sido suficiente.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Premios Ausiás March a los mejores poemarios de 2008


Hola a todas y todos:

Perdón por la foto pero Google ya no es lo que era.

Por fin llegó el día. Ha sido un largo proceso de lectura y de selección de libros. Antes que nada, muchas gracias a los autores y editoriales por los envíos de libros, envíos sin los cuales esta locura anual y ciertamente colectiva no sería posible.

Hemos variado algo el mecanismo de valoración que utilizamos el año anterior. Este año el número máximo de poemarios que podían ser seleccionados por cada uno de los cinco miembros del colectivo ha sido de quince. Tras una primera ronda de selección hicimos públicos, entre nosotros, nuestras votaciones y cada uno fue sometido a un examen por el resto de miembros que, uno por uno, examinaba cada poemario tanto desde el punto de vista de objetividad como desde el punto de vista literario y poético. Después de esa primera discusión se realizaron dos lecturas adicionales de los libros que habíamos seleccionado y finalmente cada uno realizó su votación definitiva final. Un libro votado debía tener una valoración mínima de 7 sobre 10 para ser seleccionado dentro los quince posibles. Un proceso complejo, largo, pero que asegura que la calidad final de los poemarios seleccionados sea elevada. Enhorabuena a todos.

Ganadores del premio Ausiás March 2008 - Mejores poemarios del año (por orden alfabético)

Juan Gelman - "Mundar" - Visor

Como comentamos en nuestra crítica, no estamos ante el mejor Juan Gelman, pero el poeta tiene la suficiente calidad como para que Mundar haya superado el notable para todos los miembros del colectivo. Destaca su magnífica construcción técnica, en especial a nivel prosódico, y su continuo atrevimiento estilístico. Por el lado negativo, alguna barroquización fuera de lugar, ciertas metáforas poco acertadas y varias figuras retóricas que desentonan algo en un poemario que es de lo mejor publicado en el año en España.

Crítica del libro: http://criticadepoesia.blogspot.com/2008/04/mundar-de-juan-gelman-billy-collins.html


Tomás Segovia - "Siempre todavía" - Pre-Textos

En la nueva lectura obligada que hemos realizado de los libros, el libro de Tomás ha perdido algo del entusiasmo con el que lo recibimos hace ya unos meses. La razón fundamental es que nuestra percepción sobre el exceso de carga lírica que veíamos en algunos de sus poemas se ha acrecentado con segundas y terceras revisiones del texto. A pesar de que nuestra valoración hoy sería algo más baja, "Siempre todavía" es también otro de los mejores libros del año. El poeta muestra un lado optimista, otro pesimista, otro juguetón y en ningún caso pierde altura poética ni voz propia. Hay mucha poesía en los versos de Tomás, y también una enorme sabiduría vital.

Crítica: http://criticadepoesia.blogspot.com/2008/05/toms-segovia-con-siempre-todava-y.html


Accésit al premio Ausiás March 2008 - Mejores poemarios del año (por orden alfabético)

Con 4 votos de los cinco posibles:

Concha García - "Acontecimiento" - Tusquets

Uno de los dos accésit del año va a parar a la poeta Concha García por su libro "Acontecimiento". Un libro de poesía pausada, en el que lo cotidiano se convierte en acontecimiento, en pequeños sucesos que a los ojos de un buen poeta transcienden la mirada y la propia existencia. La poeta tiene muy buenos ojos para mirar el entorno y una elevada capacidad poética para hablarnos de él. Por el lado que menos nos gusta, algunas metáforas (las imágenes nos parecen más logradas), y una segunda parte que cae en exceso en lo narrativo. Concha se mueve mejor en el terreno fragmentado y derruido sintácticamente.

José María Millares - "Liverpool" - Calambur

Magnífico rescate de este poemario publicado en 1949. El papel relevante de Liverpool está no en el hecho de ser un poeta seguido sino por lo contrario: por estar en las antípodas de lo que se escribía en ese momento. Un libro moderno sesenta años después, escrito en verso libre y de obligada lectura para los estudiosos de la poesía de postguerra, obsesivamente enfocados en grupos como Cántico, de influencia funesta y conservadora en parte de la poesía española más oficial.


Finalistas al premio Ausiás March 2008 - Mejores poemarios del año (por orden alfabético)

Este año no hay poemarios con tres votos, de manera que aunque propiamente dicho los libros con dos votos serían semifinalistas, hemos preferido utilizar el nombre de finalistas:

Enrique Falcón - "Taberna roja y otros poemas" - Baile del Sol

"Taberna roja..." es un libro de una marcada irregularidad. En ocasiones, desgraciadamente no las más comunes, el poeta es excelente. En muchos otros casos, sin embargo, hay un abuso de clichés, el lenguaje metafórico no logra su objetivo, el poema parece supeditado a lo semántico y, en línea con otro finalista, Juan Carlos Mestre, se abusa de la anáfora y de otras figuras basadas en la repetición. Recomendación no pedida: salir del calor del círculo de amistades y afinidades y ampliar el abanico de lecturas, sin prejuicios ideológicos (o reduciéndolos ampliamente).

Juan Andrés García Román - "El fósforo astillado" - DVD

Interesante la prosa poética que Juan Andrés exhibe en su último poemario, obra de teatro imaginaria (o real, quién sabe). El poeta descarga un torrente de imaginación y originalidad más que bienvenido en estos páramos y sin duda es el libro de poesía más divertido del año. Es cierto que en ocasiones hay un exceso de ornamentación imaginista y que el humor no siempre logra su objetivo pero todo se ve compensado por versos escritos en un estado de gracia con la poesía y, por tanto, con el mundo.

Oscar Hahn - "Poemas de la era nuclear" - Bartleby

El chileno Oscar Hahn nos presentó el pasado año estos "Poemas de la era nuclear" en los que, sobre todo en su primera parte, el poeta adopta un tono visionario y bíblico que eleva el poemario a cotas bastante elevadas, a pesar del riesgo. Por el lado que no ha gustado a los quienes no le votaron se destaca la rima fácil en cierto casos, el abuso del hipérbaton, una cierta exageración expresiva y un tono a veces algo arcaico. Con todo, la primera parte del libro, que incluye algunos de estos posibles defectos, contiene elementos de un lirismo maravilloso y a la vez crítico.

Yaiza Martínez - "Agua" - Idea

Yaiza repite buena posición este segundo año en los premios aunque no logra subir tan alto como el pasado año. De nuevo aparece lo mejor de su poesía, en especial el manejo de la sintaxis, la desnudez no forzada, la semántica cuidada y el lirismo. Quizás el mayor problema con el que se enfrenta la poeta es la progresión de su estilo. Cómo dar el siguiente paso, el que un nuevo libro no sea la continuación del siguiente sino un nuevo riesgo, es el mayor reto de una poeta con futuro.

Fernando Menéndez - "Un hombre por venir" - Icaria

Fernando Menéndez presenta un libro de poesía en prosa imaginativo, bien escrito, con un estilo personal y asentado. Por el lado negativo, cuando el poeta se queda en lo esencial, en la anorexia poética que tan de moda parece estar, el resultado es desalentador. El poemario, como unos cuantos de los finalistas, ha pasado prácticamente desapercibido para la crítica oficial y es tan recomendable como el resto. Un poeta a seguir.

Juan Carlos Mestre - "La casa roja" - Calambur

Otro buen poemario que tampoco es el mejor del autor. Como también comentamos en su día, "La casa roja" de Juan Carlos Mestre tiene varios aspectos muy positivos: magia, un irracionalismo a veces brillante, algunas imágenes y metáforas fantásticas, un fino sentido del humor y un enorme cuidado en los finales. Por el lado negativo, destacamos el abuso de la anáfora, de la imagen y la metáfora, y un esteticismo que a veces aparece de manera gratuita o poco acertada.

Un apunto fuera del poemario aunque no sea el momento: a este colectivo no le ha gustado lo ocurrido con los premios Ojo Crítico de RNE. Cuanto más sabemos, menos nos gusta. Y no es la primera vez que pasa en relación con el mismo entorno. Motivo de reflexión.

Crítica del libro: http://criticadepoesia.blogspot.com/2008/09/juan-carlos-mestre-la-casa-roja.html

Esther Ramón - "Reses" - Trea

Otro de los libros irregulares entre los finalistas y uno de los dos premios Ojo Crítico. A veces la poeta es sencillamente brillante. Otra veces cae en la metáfora leída, el cliché o en lo simplemente narrativo, extendiendo el poema más allá de lo aconsejable. Indiscutible la originalidad del libro en lo temático, sobre todo en su combinación, y mucho más discutible la presunta modernidad en lo formal. La poeta se mueve mejor en el terreno de lo irracional y en la imagen, y en el poema corto que en el versículo.

Ada Salas - "Esto no es el silencio" - Hiperión

Ada Salas, con "Esto no es el silencio", ha iniciado un nuevo camino poético cuyos resultados más positivos están todavía por ver. Un poemario marcado por el dolor, un dolor existencial y vital, que contiene algunos de los mejores versos del año, ubicados al lado de otros versos y poemas que hacen difícil imaginar la misma mano. Algo de repetición estilística, de comparaciones excesivas, casi de tremendismo, pero con momentos brillantes que muestran a una poeta de raza y con talento. Riesgo, con toda humildad, le pedimos. Puede ir mucho más allá.

Crítica:
http://criticadepoesia.blogspot.com/2008/05/ada-salas-esto-no-es-el-silencio.html


Por terminar, las votaciones desglosadas de los cinco miembros son las siguientes:

Nº1

Ángel Padilla Funerales del caballo La Garúa
Ángel Petisme Demolición del arcoiris Baile del Sol
Concha García Acontecimiento Tusquets
Dolan Mor Los poemas clonados de Anny Bould Centro del libro de Aragón
Esther Ramón Reses Trea
Jorge Riechmann Rengo wrongo DVD
José María Millares Liverpool Calambur
Juan Gelman Mundar Visor
Julia Barella Aguas profundas Huerga y Fierro
Julia Castillo Febrero Abada
Mario Cuenca Sandoval Guerra del fin del sueño La Garúa
Raúl Nieto de la Torre Tríptico del día después Vitruvio
Tomás Segovia Siempre todavía
Pre-Textos

Nº 2

Ada Salas Esto no es el silencio Hiperión
Concha García Acontecimiento Tusquets
Coral Bracho Cuarto de hotel Pre-Textos
Enrique Falcón Taberna roja y otros poemas Baile del Sol
Esther Ramón Reses Trea
Inmaculada Pelegrín Óxido Pre-Textos
José María Millares Liverpool Calambur
Juan Andrés García Román El fósforo astillado DVD
Juan Carlos Mestre La casa roja Calambur
Juan Gelman Mundar Visor
Miguel Ángel Bernat La belleza del silencio Calambur
Tomás Segovia Siempre todavía
Pre-Textos
Yaiza Martínez Agua Ediciones Idea

Nº 3

Ada Salas Esto no es el silencio Hiperión
Ana Delgado Cortés Poemas del amor sumiso Torremozas
Concha García Acontecimiento Tusquets
Fernando Menéndez Un hombre por venir Icaria
José María Cormán El canibal Celya
José María Millares Liverpool Calambur
Juan Andrés García Román El fósforo astillado DVD
Juan Gelman Mundar Visor
Julia Otxoa La lentitud de la luz Cálamo
Mari Ángeles Maeso Basura Mundi Huerga y Fierro
Miguel Ángel Curiel Diario de la luz DVD
Pureza Canelo Dulce nadie Hiperión
Sofía Rhei Otra explicación para el temblor de las hojas Ayuntamiento Granada
Sopa de poetes Piedra, papel, tijera Rúbrica Editorial
Tomás Segovia Siempre todavía
Pre-Textos

Nº 4


Agustín Romero Pareja Eternidades Vitruvio
Concha García Acontecimiento Tusquets
Darío Jaramillo Cuadernos de música Pre-Textos
Enrique Falcón Taberna roja y otros poemas Baile del Sol
Fernando Beltrán Mujeres encontradas Sins Entido
Fernando Menéndez Un hombre por venir Icaria
Jorge Sánchez Aguilar Estar en el mundo Amargord
Juan Gelman Mundar Visor
Juan Manuel Barrado Fragmentos de cal Gaviero
Oscar Aguado El corazón más feo del mundo Amargord
Oscar Hahn Poemas de la era nuclear (antología) Bartleby
Raúl Nuñez Marihuana para los pájaros Baile del Sol
Tomás Segovia Siempre todavía
Pre-Textos
Yaiza Martínez Agua Ediciones Idea

Nº 5
Alejandro Céspedes Los círculos concéntricos Asociación de escritores y artista españoles
Ángel González Nada grave Visor
Antonio Méndez Rubio Razón de más Igitur
Ben Clark Cabotaje Delirio
Eladio Orta Traductor del Medium Idea
Francisco Castaño Avisos y cautelas Hiperión
Juan Carlos Mestre La casa roja Calambur
José María Millares Liverpool Calambur
Juan Gelman Mundar Visor
Leopoldo María Panero Sombra Huerga y Fierro
Oscar Hahn Poemas de la era nuclear (antología) Bartleby
Rodrigo Galarza Parque de destrucciones Amargord
Teresa Soto Un poemario Rialp
Tomás Segovia Siempre todavía
Pre-Textos